Maquinaria de construcción

La contaminación de los fluidos es una de las principales causas de ralentización del rendimiento, funcionamiento errático, pérdida de productividad, aumento de los costes de explotación y fallos catastróficos de las máquinas y equipos móviles de construcción. La tecnología Triple R ha demostrado ser un valor añadido para muchos clientes activos en todo el mundo en el mercado de la construcción que trabajan con vehículos móviles e instalaciones móviles.

Las máquinas móviles suelen utilizar muchos sistemas de aceite para realizar tareas en ubicaciones variadas. Las unidades móviles son, por definición, equipos caros que deben funcionar cuando están in situ. A menudo, otros procesos no empiezan hasta que la maquinaria móvil ha terminado su trabajo, por lo que hay que evitar a toda costa las paradas de producción, ya que las paradas pueden retrasar todo un proyecto.

Las contaminaciones no tratadas provocan ineficiencias en los fluidos, tanto en el aceite del motor como en el aceite hidráulico. En los sistemas hidráulicos, las pérdidas de productividad pueden pasar desapercibidas, ya que la eficiencia puede descender hasta 20% antes de que el operario detecte siquiera un cambio en el funcionamiento. Esto supone una pérdida de productividad de un día a la semana.

Hubo un tiempo en que las presiones hidráulicas eran mucho menores que las actuales, las holguras entre las superficies internas de metal y metal no eran tan estrechas y nos preocupaban los contaminantes que podíamos ver. Pero a medida que los clientes piden más potencia, mayores fuerzas de rotura y tiempos de ciclo más rápidos, la industria de la maquinaria está respondiendo con diseños de sistemas de fluidos más sofisticados, presiones más altas, holguras más estrechas y la electrohidráulica han hecho que la maquinaria móvil sea más productiva y fácil de manejar. Sin embargo, también han aumentado la necesidad de sistemas de fluidos limpios durante toda la vida útil del producto. Los operarios y los equipos de mantenimiento tienen que preocuparse ahora por la suciedad y otros contaminantes que no pueden ver, partículas tan pequeñas como de 2 a 5µ. Esas pequeñas partículas pueden ser el principio de un desgaste prematuro y una pérdida de eficacia, y no hacen falta demasiadas partículas para contaminar un sistema.

Una consecuencia de la aplicación en la construcción al aire libre es también que la maquinaria móvil es propensa a la condensación de agua, así como a la contaminación por partículas en el aceite. La tecnología de Triple R Filtration puede utilizarse con elementos filtrantes estándar o, en caso de mayores cantidades de agua, con elementos Water Eater (WE) en la maquinaria móvil para eliminar las partículas y el agua condensada en un solo proceso. Está claro que las averías debidas a aceite contaminado tienen efectos dramáticos.

Los sistemas de filtración Triple R eliminan eficazmente el agua condensada, los lodos, el agua y las partículas con un mismo elemento filtrante. Esta purificación de aceite de alto nivel aumenta la fiabilidad, el tiempo de actividad y la vida útil de componentes costosos como motores y válvulas proporcionales y servo.

Los efectos típicos de la contaminación del aceite pueden ser la desviación de los cilindros, sacudidas de la dirección, menor rendimiento, funcionamiento errático, intervalos de mantenimiento más cortos, mayores costes de funcionamiento, pérdida de productividad y fallos catastróficos.